Del ÉXITO al FRACASO escolar y…… del FRACASO al ÉXITO escolar

Durante toda la etapa de escolarización de nuestros hijos e hijas, este camino se puede recorrer en ambos sentidos.

Por ejemplo, durante la Educación Primaria, han podido obtener buenos resultados, o han ido bien o muy bien casi sin esfuerzo, y cuando llegan a la ESO empiezan a bajar sus resultados e incluso a suspender…
También hay escolares que tienen dificultades en su Educación Primaria, pero lo hemos ido superando con nuestro propio esfuerzo como progenitores, ayudándoles con el estudio o proporcionándoles ayudas
externas con profesorado particular y academias. Pero cuando intentamos que estudien por su cuenta, las dificultades siguen presentes o han aumentado.
El recorrer este camino, del fracaso al éxito escolar y viceversa, depende de muchos factores, tanto internos, la personalidad y capacidades del propio escolar, como externos: entorno familiar y escolar en el que vive cada niño, niña o adolescente.

Estos factores no son del todo independientes entre sí e inamovibles, si detectamos dificultades, tanto a nivel interno, como a nivel externo, podemos mejorarlo. Nuestras capacidades, como la inteligencia, atención, memoria, fluidez verbal, etc…. vienen determinadas biológicamente, pero con la práctica podemos convertirlas en habilidades y mejorar nuestra forma de estudiar y nuestros resultados.

En el entorno escolar, influyen el nivel de exigencia y de dificultad de cada curso. Cada asignatura, el profesorado, con quién están en clase, son factores externos de vital importancia que afectan al rendimiento escolar. Si los conocemos, podemos modificarlos para darle a nuestros hijos un entorno escolar seguro y
motivador.

La familia es el pilar fundamental para la creación de nuestros propios valores y nuestra zona de confort.  El adecuado acompañamiento emocional con amor y comprensión, así como el establecimiento de límites adecuados, son factores fundamentales para el desarrollo de la autoestima de nuestros hijos e hijas y la base para desarrollar un interés en el aprendizaje.

A nivel personal, durante la etapa escolar, en la infancia y adolescencia, se va creando su propia personalidad, sus valores, sus motivaciones, sus hábitos…. Todas las personas, conseguimos tener una autoestima y autoconcepto ajustados en función de la percepción de competencia que tenemos de nosotras mismas, de la seguridad que obtenemos del entorno y de lo queridas y valoradas que nos sentimos.
Tanto el desarrollo emocional como el académico es importante, y va estrechamente relacionado y marcando la dirección hacia el fracaso o éxito escolar